Inconsciente Colectivo

Gracias a la profunda ineficiencia de nuestro aparato burocrático, a la estupidez genérica y a la voracidad de algunos politiqueros que no tienen ninguna base real, porque solo son esquirlas de algún líder de barrio, nos vemos enfrentados a la situación que atraviesa este paisaje. Por otro lado están aquellos que se permiten participar del tráfico de  lo robado y la economía informal, aquellos que comercian felizmente con la piratería y con los intermediarios de la central de abastos. Coyotes. México es un país erigido en el lomo de los coyotes, traficantes, dealers, testaferros, ladrones, caciques, intermediarios, lastimeros, brokers, especuladores, engañabobos, merolicos y obviamente, los que consentimos todo esto.

 Este tipo de situaciones que van desde la ignorancia hasta el vale madrismo, generan que las instituciones encargadas, no cumplan con sus deberes sociales; Aunque es cierto algo, totalmente criticable, ¿que se le debe dar a quienes no producen nada, a quienes evaden el fisco, a quienes se roban los energéticos, a quienes son el pilar fundamental del mercado de la lastima?; Quien ha sugerido que se debe evitar su reproducción…?, Nadie. Son parte del sistema, son necesarios para muchas instituciones que se benefician y lucran con su existencia, el mercado de pobres, trafico e órganos,  prostitución infantil, los madrinas, los negocios de contracultura, de rebeldía y revolucionarios grupos de choque.

Una de las posibilidades para evitar la fuga de capitales mercantiles sanos hacia la economía informal, es precisamente no participar en actividades que los apoyen.  Una persona que compra un objeto robado, aunque este fuera “muy barato” promueve este tipo de comercio y por lo tanto promueve el acto de robar, (aunque si le roban a él,  sintiera derecho a reclamar). Una persona que asiste a su iglesia y entrega una “limosna” cree estar apoyando su culto o que eso tendrá algún efecto en su comunión divina, sin embargo un alto porcentaje de esos dineros va a parar fuera de este paisaje, es decir que ni los aranceles funcionan contra esto. Sería imposible divisar cada una de las formas en que la gente común apoya a la crisis económica que nos crece al rededor, y es posible que un alto porcentaje de la masa, ni siquiera lo entienda.  Un buen principio para iniciar un cambio, es no integrar su dinero bueno al malo, en ninguna de sus presentaciones.