Gateando
Estaban 2 gatos sentados, dos gatos que sentados estaban arañando las paredes de tablado en el callejón de junto, sin que gata alguna se fijara en ellos, y como atormentados del café, - muy raro-
El olor a gata en celo los persigue y los aniquila (se olvidan del resto de las gatas, y que los ángeles, existe). Cuando las tablas son más altas de lo que pueden brincar se oye su maullar desesperado, al otro lado; se notan tristes y tensos esperando que algo acurra en su barrera emocional. Dicen que los gatos no creen en milagros, así que es probable al rato se aburran, y se indignen… Y se vallan por ahí en busca de otro amor sin importarles un carajo el futuro.
Cada gato ve 3 gatos doloridos, y se lamen, se lamentan, se desinteresan, pero se molestan si otro gato se acerca; Yo soy de angora dice 1, ¡a otro gato con ese queso! - contestan-, mientras se disponen a partir bailando con la más fea.
Se me ocurre que aprender a caer en 4 patas es lo único que no he aprendido de los gatos, pero en el arte de gatear siempre me las arreglo.
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